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from the American Academy of Orthopaedic Surgeons

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Dolor en la zona lumbar (Low Back Pain)

Casi todas las personas experimentarán dolor lumbar en algún punto de la vida. Este dolor puede variar de leve a fuerte. Puede ser breve o duradero. Independientemente de cómo suceda, el dolor lumbar puede dificultar muchas actividades cotidianas.

Anatomía

La columna está formada por huesos pequeños llamados “vértebras”, que se sitúan uno encima del otro. Los músculos, los ligamentos, los nervios y los discos intervertebrales son otras partes de la columna vertebral.

Los músculos y los ligamentos ayudan a estabilizar los huesos, mientras que los discos intervertebrales brindan "amortiguación" a la columna para que pueda tolerar diversos movimientos y la tensión que se aplica sobre ella. Los nervios que permiten la comunicación entre el cerebro y el cuerpo se encuentran dentro de la columna vertebral.

Entender la columna vertebral y cómo funciona puede ayudarlo a comprender mejor el dolor lumbar. Obtenga más información sobre la anatomía de la columna vertebral: Conceptos básicos de la columna

Descripción

El dolor de columna varía según la persona. Puede tener una aparición lenta o aparecer repentinamente. Puede ser intermitente o constante. En la mayoría de los casos, el dolor de columna se resuelve solo en unas semanas.

Causa

El dolor en la zona lumbar puede producirse por muchos motivos. A veces, se produce después de un movimiento específico, como levantar peso o agacharse. El mero envejecimiento también cumple un rol en muchas afecciones de la columna.

A medida que envejecemos, también envejece nuestra columna. El envejecimiento produce cambios degenerativos en la columna vertebral. Estos cambios comienzan después de los treinta años o incluso antes y pueden hacernos propensos al dolor de columna especialmente si exageramos con las actividades.

Estos cambios relacionados con el envejecimiento no impiden a la mayoría de las personas llevar una vida productiva y generalmente sin dolor. Todos hemos visto a la maratonista de 70 años que, sin duda, tiene cambios degenerativos en la columna.

Hiperactividad

Una de las causas más comunes del dolor lumbar es el dolor muscular causado por la hiperactividad. Los músculos y ligamentos pueden sobreestirarse o lesionarse.

A menudo, la causa de esto es ese primer partido de sóftbol o golf de la temporada, o demasiado trabajo de jardinería o palear mucha nieve en un día. Todos conocemos este endurecimiento y dolor en la zona lumbar y otras zonas del cuerpo que, en general, desaparecen en unos días.

Esto sucede usualmente alrededor del primer partido de softbol o de golf de la temporada, o demasiado trabajo en el jardín o por palear nieve en un día. Todos estamos familiarizados con esta "rigidez" y molestia en la cintura — y otras áreas del cuerpo — que suelen desaparecer a los pocos días.

Lesión discal

Algunas personas presentan dolor lumbar que no desaparece en unos días. Esto puede significar que hay una lesión en un disco intervertebral.

Fisura discal. Con el envejecimiento, se producen pequeños desgarros en la parte externa del disco (anillo). Algunas personas con fisuras discales no tienen ningún dolor. Otras pueden tener dolor que dura semanas, meses o incluso más tiempo. Una cantidad menor de personas pueden presentar dolor constante que dura años y produce un nivel importante de incapacidad. No se conoce bien por qué algunas personas tienen dolor y otras no.

Hernia de disco. Otro tipo frecuente de lesión discal es el "desplazamiento" o hernia de un disco.

Hernia de disco.

Un disco se hernia cuando su centro gelatinoso (el núcleo) se desplaza hasta empujar el anillo exterior. Si el disco está muy desgastado o lesionado, el núcleo puede desplazarse completamente. Cuando sobresale hacia fuera del conducto vertebral, el disco herniado ejerce presión sobre los nervios espinales sensibles, lo que causa dolor.

Dado que la hernia de disco en la zona lumbar suele ejercer presión en la raíz nerviosa que conecta con la pierna y el pie, a menudo, se produce dolor en la nalga y la pierna. Esto se conoce como "ciática".

Las hernias de disco suelen producirse al levantar o empujar objetos, al inclinarse o al girar.

Degeneración de disco

Con la edad, los discos intervertebrales comienzan a desgastarse y encogerse. En algunos casos, pueden colapsar por completo y hacer que las articulaciones facetarias (articulaciones pequeñas ubicadas entre cada vértebra en la parte posterior de la columna) rocen entre sí. Eso produce dolor y endurecimiento. También se ha observado que fumar acelera la degeneración discal.

Degeneración de disco.

Este desgaste en las articulaciones facetarias se conoce como "osteoartritis", que también se conoce como "espondilitis". Puede producir otros problemas de columna, incluida la estenosis espinal.

Espondilolistesis degenerativa

Los cambios producidos por el envejecimiento y el desgaste general hacen que las articulaciones y los ligamentos no puedan mantener la columna en la posición correcta. Las vértebras pueden moverse más de lo que deberían, y una vértebra puede deslizarse por encima de otra. Si se produce demasiado desplazamiento, es posible que los huesos comiencen a ejercer presión en los nervios espinales.

Espondilolistesis.

Estenosis espinal

La estenosis espinal se produce cuando el espacio que rodea la médula espinal se estrecha y ejerce presión en la médula y los nervios espinales.

Cuando los discos intervertebrales colapsan u se produce osteoartritis, el cuerpo puede responder generando hueso nuevo (artritis) en las articulaciones facetarias para apoyar las vértebras. Con el tiempo, este sobrecrecimiento de hueso (llamado "espolón") puede producir un estrechamiento del canal espinal. La osteoartritis también puede hacer que los ligamentos que conectan las vértebras se engrosen, lo que puede estrechar el canal espinal.

Estenosis espinal.

Escoliosis

La escoliosis es una curva anormal de la columna que pueden presentar los niños, a menudo, en la adolescencia. También puede aparecer en pacientes mayores con artritis. Esta deformidad de la columna puede causar dolor de columna y, posiblemente, dolor, debilidad o entumecimiento en las piernas si hay presión sobre los nervios.

Fractura por compresión

Las fracturas por compresión vertebral son una causa frecuente de dolor de columna en persona mayores. A media que envejecemos, los huesos se vuelven más débiles y fáciles de quebrar, una afección llamada "osteoporosis". En personas con osteoporosis, un traumatismo menor (como sentarse con fuerza sobre una silla o inodoro rígidos, o una caída al suelo) puede causar fracturas en los huesos de la columna, lo que genera dolor intenso en la columna con los movimientos.

Causas adicionales

Existen otras causas del dolor de columna, algunas de las cuales pueden ser graves. Si tiene una enfermedad vascular o arterial, antecedentes de cáncer o dolor persistente independientemente del nivel de actividad o la postura, debe consultar a su médico de atención primaria.

Síntomas

El dolor de columna varía. Puede ser punzante o similar a una puñalada. Puede ser una molestia, un dolor o una sensación de contractura. El tipo de dolor que tiene dependerá de la causa subyacente del dolor de columna.

Para la mayoría de las personas, estar en posición horizontal o recostarse mejora el dolor lumbar, independientemente de la causa subyacente.

Las personas con dolor en la zona lumbar, a menudo, sienten que el dolor empeora con las siguientes actividades:

  • Agacharse y levantar peso
  • Estar sentado 
  • Estar de pie y caminar

También es posible que experimenten lo siguiente:

  • Dolor de columna intermitente, que suele tener un curso ascendente y descendente, con días buenos y malos.
  • Dolor que se extiende desde la columna hasta la nalga o la zona de la cadera externa, pero no hasta la pierna.
  • Ciática. Esto incluye dolor de nalga y pierna, incluso adormecimiento, cosquilleo o debilidad que llega hasta el pie. Si bien la ciática suele asociarse con la hernia de disco, es posible tener ciática sin dolor de columna.

Independientemente de su edad o sus síntomas, si el dolor de columna no mejora en unas semanas o si se asocia con fiebre, escalofríos o pérdida de peso inesperada, debe llamar a su médico. Otros síntomas de advertencia son la debilidad en las piernas y la pérdida del control de esfínteres.

Pruebas y diagnóstico

Antecedentes médicos y examen físico

Después de analizar los síntomas y los antecedentes médicos, el médico le examinará la columna. Esto incluirá revisarle la columna y presionar en diferentes zonas para ver si duele. Su médico puede solicitarle que se incline hacia adelante, hacia atrás y a los lados para detectar limitaciones o dolor.

Su médico también puede medir la función de los nervios de las piernas. Esto incluye controlar los reflejos de las rodillas y los tobillos, además de realizar pruebas de fuerza y de sensibilidad. Estas pueden indicarle al médico si hay una afectación grave de los nervios.

Pruebas de imágenes

Otras pruebas que pueden ayudar al médico a confirmar el diagnóstico incluyen las siguientes:

Radiografías. Si bien solo permiten visualizar los huesos, las radiografías simples pueden determinar si tiene las causas más evidentes de dolor de columna. Permiten ver huesos fracturados, cambios causados por el envejecimiento, curvaturas o deformidades. Las radiografías no permiten ver los discos, los músculos ni los nervios.

Imágenes por resonancia magnética (IRM). Las exploraciones por IRM pueden generar mejores imágenes que las radiografías de los tejidos blandos, como músculos, nervios y discos vertebrales. Las afecciones como hernia de disco o infecciones son más visibles en una exploración por IRM.

Exploraciones por tomografía axial computarizada (TAC). Si su médico sospecha que hay un problema en los huesos, podría sugerir que se le realice una TAC. Este estudio es como una radiografía tridimensional que se centra en los huesos.

Gammagrafía ósea. Es posible que su médico sugiera realizarle una gammagrafía ósea si necesita más información para evaluar su dolor y asegurarse de que no esté causado por un problema poco frecuente, como cáncer o una infección. Una gammagrafía ósea también puede ayudar a detectar una fractura.

Prueba de densidad ósea. Si sospecha de osteoporosis, su médico puede solicitar que se le realice una prueba de densidad ósea. La osteoporosis debilita los huesos y genera mayor probabilidad de fracturas. La osteoporosis en sí no debería causar dolor de columna, pero las fracturas espinales por osteoporosis sí.

Tratamiento

En general, el tratamiento del dolor lumbar se divide en tres categorías: medicamentos, fisiatría y cirugía.

Tratamiento no quirúrgico

Medicamentos. Muchos medicamentos pueden utilizarse para aliviar el dolor.

  • El paracetamolpuede aliviar el dolor con pocos efectos secundarios.
  • Los medicamentos antiinflamatorios no esteroideos (AINE), como la aspirina, el ibuprofeno y el naproxeno, reducen el dolor y la inflamación.
  • Los esteroides, administrados por vía oral o inyectados en la columna, suministran una dosis alta de antiinflamatorio.
  • Los relajantes musculares, como el metocarbamol, el carisoprodol y la ciclobenzaprina, son otro tipo de medicamentos que pueden ayudar. Sin embargo, pueden dar sensación de mareo. Por lo tanto, si toma relajantes musculares, no conduzca ni realice tareas que requieran estar alerta.

Fisiatría. El dolor en la zona lumbar puede ser incapacitante. En general, la combinación de medicamentos y tratamientos terapéuticos brindan alivio del dolor suficiente como para permitirle hacer todo lo que desea.

  • La fisioterapia puede incluir modalidades pasivas, como calor, hielo, masajes, ultrasonido y electroestimulación. La terapia activa consiste en hacer estiramiento, levantar peso y hacer ejercicios cardiovasculares. Hacer ejercicio para restablecer el movimiento y la fuerza de la zona lumbar puede ayudar a aliviar el dolor.
  • Se suelen utilizan dispositivos ortopédicos. El más frecuente es un dispositivo similar a un corsé que cubre la espalda y el estómago. Los dispositivos ortopédicos no siempre ayudan, pero algunas personas informan que se sienten más cómodas y estables cuando los usan.
  • La quiropraxia o terapia de manipulaciónestá disponible de muchas formas diferentes. Algunos pacientes logran aliviar el dolor en la zona lumbar con estos tratamientos.
  • A menudo, se utiliza tracción, pero no hay evidencia científica de eficacia.
  • Otros programas de ejercicios, como Pilates o yoga, resultan útiles para algunos pacientes.

Tratamiento quirúrgico

La cirugía para el dolor lumbar debe considerarse solo cuando se hayan probado opciones de tratamiento no quirúrgico y fracasaron. Lo mejor es intentar con opciones no quirúrgicas durante un período de seis meses a un año antes de considerar una cirugía.

Además, la cirugía debe considerarse únicamente si el médico puede identificar la fuente del dolor.

La cirugía no es una opción de última instancia. Algunos pacientes no son elegibles para la cirugía, aunque tengan dolor significativo y otros tratamientos no hayan tenido éxito. Algunos tipos de dolor lumbar crónico simplemente no pueden tratarse con cirugía.

Artrodesis vertebral. La artrodesis vertebral básicamente es un proceso de soldadura. El concepto básico es fusionar las vértebras doloridas para que suelden y formen un único hueso sólido.

La artrodesis vertebral elimina el movimiento entre los segmentos vertebrales. Es una opción cuando el movimiento es la fuente del dolor. Por ejemplo, su médico puede recomendar artrodesis vertebral si tiene inestabilidad espinal, una curvatura (escoliosis) o degeneración grave de uno o más discos. La teoría es que, si los segmentos dolorosos de la columna no se mueven, no deberían doler.

La fusión de las vértebras lumbares se ha realizado durante décadas. Han evolucionado una variedad de técnicas quirúrgicas. En la mayoría de los casos, se utiliza un injerto de hueso para soldar las vértebras. Se emplean tornillos, varas o espaciadores para mantener estable la columna mientras suelda el injerto de hueso.

La cirugía puede realizarse desde el abdomen, el costado, la espalda o mediante una combinación de estos enfoques. Incluso existe un procedimiento que se realiza a través de un pequeño orificio en el cóccix. No hay un procedimiento en particular que haya demostrado ser mejor que otro.

Los resultados de la artrodesis vertebral para el dolor lumbar son diversos. Puede ser muy eficaz para eliminar el dolor, no tener efecto alguno y cualquier grado de eficacia intermedio. La recuperación total puede llevar más de un año.

Reemplazo de disco. Este procedimiento implica eliminar el disco y reemplazarlo con uno artificial. Se realiza a través del abdomen, generalmente en los últimos dos discos de la columna.

El objetivo del reemplazo de disco es permitir que el segmento espinal mantenga cierta flexibilidad y un movimiento más normal.

Si bien ya no se considera tecnología nueva, los resultados del remplazo con disco artificial en comparación con la artrodesis son controversiales.

Discectomía. La discectomía implica retirar la parte dañada de un disco herniado. Esto libera la presión en el nervio, lo que permite resolver la ciática.

Laminectomía. La laminectomía implica retirar los ligamentos engrosados y los espolones que comprimen los nervios. Esto libera la presión en el canal espinal, lo que reduce el dolor de los nervios.

Cifoplastía o vertebroplastía. Este procedimiento implica inyectar cemento óseo en el hueso fracturado para estabilizar una fractura osteoporótica por compresión. Esto ayuda a eliminar el dolor punzante asociado con la fractura.

Prevención

Quizá no sea posible prevenir el dolor lumbar. No podemos evitar el desgaste normal de la columna que acompaña el envejecimiento. Sin embargo, podemos adoptar ciertas medidas para reducir el impacto de los problemas lumbares. Tener un estilo de vida saludable es un buen comienzo.

Haga ejercicio regularmente

Combine ejercicios aeróbicos, como caminar o nadar, con ejercicios específicos para mantener fuertes y flexibles los músculos de la espalda y el abdomen.

Use una técnica correcta para levantar peso

Asegúrese de levantar objetos pesados con fuerza de las piernas, no de la columna. No se incline para levantar un objeto. Mantenga la columna recta y flexione las rodillas.

Mantenga un peso saludable

El sobrepeso ejerce tensión adicional en la zona lumbar.

Evite fumar

Tanto el humo como la nicotina hacen que la columna vertebral envejezca a un ritmo mayor que el normal. Si fuma, 

Use una postura adecuada

La buena postura es importante para evitar problemas en el futuro. Un terapeuta puede enseñarle la manera adecuada de estar de pie, sentarse y levantar peso.

Last Reviewed

junio 2022

Peer-Reviewed by

Alberto Bolanos, MD, FAAOS

AAOS does not endorse any treatments, procedures, products, or physicians referenced herein. This information is provided as an educational service and is not intended to serve as medical advice. Anyone seeking specific orthopaedic advice or assistance should consult his or her orthopaedic surgeon, or locate one in your area through the AAOS Find an Orthopaedist program on this website.